Bromas aparte, el análisis marxista de los aspectos culturales del capitalismo (la superestructura, si lo preferís) es muy muy interesante.
Me parece especialmente importante como el capitalismo se apropia de conceptos "buenos" de forma hipócrita. Estos días veíamos como un neonazi agredía a un estudiante universitario de izquierdas en la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid.
He leído a comentaristas decir que la agresión estuvo justificada porque el alumno de izquierdas era un intolerante que estaba retirando los carteles de la Asociación a la que pertenecía el neonazi.
La tolerancia y la libertad de expresión se enmarcan en criterios democráticos. La tortura no es algo "tolerable", al igual que el fascismo. Hay que tolerar y permitir la libertad de expresión sí, pero si se "tolera" aquello que va en contra de la propia tolerancia y de la propia libertad de expresión se está cavando la propia tumba de dichos conceptos.
Que una asociación neonazi se instituya en una universidad y reciba todo tipo de ayudas públicas me parece una aberración. Si esto fuera un país con instintos democráticos, la apología del fascismo estaría prohibida como en Alemania.
Para no alargarme, os pongo este vídeo donde Slavoj Zizek explica el concepto capitalista de caridad, y porque en la práctica no es un concepto positivo, aunque en "abstracto" si lo sea.
Es un gran filósofo, pero controvertido, por lo que ver el vídeo entero para no haceros una idea equivocada sobre él.
Además, parte de lo que trata se podría relacionar con el artículo sobre publicidad de Jacobo. El cómo nos venden "la ecología" en un taza de café de una multinacional. Acto que suele llevarnos, como la caridad, a calmar nuestras conciencias sin hacer algo al respecto para evitar el problema.
Próximamente, cuando lea alguna noticia sobre ello que me indigne profundamente, hablaré del concepto capitalista de "libertad".
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