lunes, 17 de marzo de 2014

Un momento sin relojes.


Aire de primavera.
Ver florecer amaneceres
a tu lado.

Despertarse con el abrazo,
la suavidad de las pieles
que me recuerdan
que la vida está
para ser vivida.

Contar los minutos
que faltan para tus besos,
las chispas, los abrazos,
de este amor tierno y salvaje
que sufren en silencio
nuestras sábanas.

Silencio al mirarnos,
magia que rompe
las grises rutinas,
tu mano y mi mano,
dulces en la caricia,
duros puños cerrados
contra quien quiera
arrebatar, privatizar
nuestra dicha.

Prieto el abrazo,
como las letras
de un librillo
de poemas.

Donde el mercado
no entra,
disparamos
con goces y suspiros.
Amor, amarnos,
hasta quedarnos
sin aire y sin balas.

martes, 4 de marzo de 2014

Un espejo me dijo.


El tiempo que transcurre
cuando alguien espera tu llamada
es sangre derramada,
es el frío que apaga la lumbre.

El infierno está empedrado
con buenas intenciones,
que tarde repararon
en el dolor de corazones.

No te engañes,
ni el silencio, ni la noche,
te dieron cobijo antes.

Solo el abrazo y el roce
de unos labios como
nunca igual conociste.

Un cigarro triste se apaga,
pero una chispa brilla
bajo la noche nublada
que anuncia el nuevo día.

¿Ves aquel rascacielos,
esa montaña de libros,
entre Goethe, Lenin y Tolstoi?
¿Escuchaste la novena sinfonía?
Jamás obra alguna del hombre
te enseño lo único que importa:
a amar.